La corporación de Aseo Municipal y las concesiones

Por Reynaldo Peguero

Parece que hay confusión normativa en algunos técnicos para identificar la diferencia entre las funciones de la Corporación de Aseo Municipal de Santiago (CASA) y la importante competencia municipal puesta en funcionamiento por el Ayuntamiento de Santiago para licitar exitosamente la transformación de los residuos sólidos en energía eléctrica. Una cosa no se contradice a la otra, si no todo lo contrario se complementa. Mientras C.A.S.A es una estructura municipal de servicio público, sin fines de lucro, que tiene naturaleza jurídica mixta (pública-privada), personalidad jurídica, patrimonio propio y duración ilimitada, creada por la concurrencia, concertación y consenso de la Ordenanza Municipal No. 2748-06; por su parte los servicios ofertados por empresas para transformar en energía los residuos o gestionar un relleno sanitario o recolectar aceite de cocina reciclable, entre otros, son prestaciones que fortalecen en vez debilitar el Sistema de Gestión Integral del Aseo Municipal de Santiago.      

El Ayuntamiento de Santiago se comprometió institucionalmente en conjunción con sectores sociales y empresariales tales como el Arzobispado de Santiago, la Asociación de Comerciantes e Industriales, la Asociación para el Desarrollo (APEDI), la Cámara de Comercio y Producción, la Asociación de Industriales de la Región Norte (AIREN) y el Consejo Desarrollo Estratégico de la Ciudad y el Municipio de Santiago (CDES), a garantizar la viabilidad y potencialidad de CASA para encargarse de establecer, operar y hacer sostenible el Sistema de Gestión de Aseo Municipal. Con el aporte de CASA Santiago hizo una contribución para que el Ayuntamiento se concentre y compacte en el avance integral del municipio. Para que pueda hacer mucho más con los escasos recursos que maneja.

Son muy pocos los Ayuntamientos exitosos de América y Europa afiliados al CIDEU que conozco in situ, que manejan los residuos y desechos exclusivamente desde un departamento público del Ayuntamiento. La Agencia Española de Cooperación (AECID) y FUNDEMUCA en el estudio inicial que generó el exitoso y millonario programa de Fortalecimiento Institucional de esa institución en Santiago, conducido por el doctor en gestión municipal, Mateo Ambrosio y donde colaboré como investigador de apoyo, puso en evidencia que una de las cuestiones con mayor potencialidades de éxito era la “tercerización” y las concesiones de los servicios municipales, siempre y cuando se observe y respete la Constitución y las Leyes de la República.

La Corporación de Aseo Municipal de Santiago (CASA) es un organismo descentralizado creado en la misma lógica institucional de CORAASAN. Una entidad tercerizada para coordinar la elaboración y ejecución del Plan de Gestión Integral de Limpieza Municipal de Santiago y la administración eficiente de todas las operaciones de la Cartera Básica de Provisión de Servicios de Limpieza de este sistema. Si ya existe como entidad porque sus estatutos y principios esenciales fueron aprobadas por sendas ordenanzas municipales, entonces que se respete la ley y se pongan en funcionamiento integral con directiva y presidencia en funciones. Si se piensa lo contrario, entonces que se deroguen los mandatos, las ordenanzas y las resoluciones que imponen y exigen su funcionamiento.

Si se desea una administración eficiente de todas las operaciones de la Cartera Básica de Provisión de Servicios de Limpieza del Sistema de Aseo de Santiago, entonces que se deje que CASA ayude al Ayuntamiento Municipal para el barrido y limpieza en vías vehiculares y peatonales, solares baldíos, mercados, imbornales, reatas, parques, plazas, plazoletas y áreas verdes.

Que se permita que la Corporación de Aseo Municipal de Santiago (CASA) impulse el acopio y traslado formal de los desechos domésticos; que impulse la recolección y transporte micro-localizada de desechos mediante “cooperativas barriales”. Déjenla que ayude en la recolección y transporte de desechos especiales (hospitalarios, comerciales, industriales, materiales de construcción, chatarras y residuos peligrosos);  y finalmente masifique en los medios de comunicación una educación ciudadana participativa sobre residuos y pueda favorecer una disposición final y un tratamiento con la debida sostenibilidad ambiental, manejo higiénico y eficaz de los desechos. Eso lo veremos.

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