Perspectivas del Parque Central: Metropolitano o central

La historia de los jardines y parques tiene un cuerpo documental que hay que estudiar. Inicia en los jardines de la antigüedad, como los construidos por israelitas, medos, griegos, persas y babilonios. De estos se pasa al jardín romano, luego al parque de la Edad Media y al jardín distintivo de la conquista árabe de Iberia. De aquí a los jardines que caracterizaron el Renacimiento y la libre empresa, el de los italianos y los franceses, y sobre todo el parque paisajístico inglés.

En lo concreto, el origen de parque público al estilo de hoy, se puede rastrear hasta el siglo XVIII en Inglaterra, muy asociado al nacimiento del capitalismo inglés y la acumulación de gran cantidad de obreros peatones. Sin conocer el origen de la economía de mercado,no es posible entender el parque público que necesitamos hoy.

Alessandra Ponte en el estudio sobre los parques públicos de Gran Bretaña y USA y su análisis de la transición del “espíritu de la plaza al espíritu de la civilización”, demuestra que a finales del siglo XVIII y al inicio del XIX, el jardín urbano sufrió, igual que la arquitectura, una transición decisiva al pasar de las formas estéticas de los diseños sobre “el qué” al pragmatismo del “para qué” o funcionalismo.

En Santiago desde el siglo XIX, el actual Parque Duarte se denominaba “Parque Central”.  Realmente, si revisamos bien la historia al nivel de detalle que nos aporta Edwin Espinal,nos daremos cuenta que ese espacio era una sabana en medio de la Plaza de Armas donde transitaban a discreción junta de bueyes, vacas, caballos, burros, puercos, ciudadanos comunes y vendedores ambulantes.

La ciudad que era Santiago hace más de 100 años definía el Parque Duarte como el centro del desarrollo urbanístico o mejor aún para la ocasión esa era su primera y única centralidad. Hoy en el Siglo 21, Santiago es una Metrópolis, donde este espacio no es ya el centro del crecimiento urbano, y el espacio donde se ubicaba el aeropuerto viejo, se ha convertido en el nuevo eje de centralidad, precisamente es el territorio donde se construye el nuevo Parque Central o Metropolitano de Santiago.

 En el Santiago del siglo XIX se dio la evolución de las PLAZAS a los PARQUES. Hoy en el siglo XXI acontece una segunda evolución, de los parques al sistema verde de espacios públicos. Se conoce que cuando se diseña un SISTEMA es diferente a cuando se planea un PARQUE. El sistema articula, organiza y gesta con herramientas de administración, los parques se levantan con instrumentos de construcción.

Un sistema de parques impone que cada espacio implemente a su vez, un subsistema de gestión para dirigirlo y hacerlo sostenible, y asegurar en última instancia, su contribución a la adaptación al cambio climático y a la reducción de la producción de gases con efecto invernadero.

Un sistema de parques imputa la puesta en operación, eficiente administración y mantenimiento del conjunto de parques en Santiago, de forma que se garantice y amplíe el conjunto de espacios públicos, y se le oferte a la población más excluida y de bajos ingresos, un mayor acceso al sistema verde, se eleve el índice de permeabilidad del suelo urbano para eficientizar la recolección pluvial y realizar acciones permanentes de creación cultural.

Se impone asegurar la sustentabilidad ambiental de los espacios públicos y áreas verdes urbanas procediendo a conciliar tres intervenciones: i) la eficiencia ecológica, ii) la eficiencia de la adaptación al cambio climático y iii) la eficiencia económica. Necesitamos realizar verdaderas investigaciones participativas sobre viabilidad y la integración de la animación sociocultural al sistema verde.

El Parque Central se ha rediseñado y se construirá, dotado de un proceso de gestión que vincula el sistema verde y los espacios públicos, articulado con el Parque Botánico. El aporte de parques públicos en barrios de bajo acceso al verde. El establecimiento de Corredores Ecológicos y el relanzamiento de los parques del Centro Histórico, con una gestión cultural atrayente de visitas ecológicas, culturales y deportivas.