April 30, 2019
Santiago antes y después del Monumento a la Restauración de la Independencia
El título de nuestra contribución de hoy sale de la pluma talentosa de Federico Carlos Álvarez. Notable jurista santiaguero que hace cinco años en el Centro León se posicionó de esta manera. En ese entonces, quedé prendido por su contribución analítica a propósito de los 70 años del Monumento a los Héroes de la Restauración (MHR). Compartió el panel con el maestro del desarrollo urbano de Santiago, Rafael Emilio Yunén, quien también formuló muy buenas precisiones. En esta isla donde mucha gente expone y escribe como si estuviera partiendo de cero, subrayamos estos abordajes porque fueron innovadores. Suscribimos la tesis que con el Monumento, la ciudad de Santiago llegó a un punto de inflexión positivo de su desarrollo urbano.
Hoy estamos de celebraciones por los 75 años del Monumento a los Héroes de la Restauración de la Independencia de República Dominicana.El pujante Centro de Convenciones y Cultura UTESA, Ministerio de Cultura, Gobernación del Monumento y otras entidades, organizaron una exitosa premiación fotográfica, un interesante coloquio y varias actividades.
El Monumento de Santiago habla y sus leyendas describen una narrativa política, histórica y urbanística. Arquitectónicamente y en marca ciudad nada parecido al nivel de identidad, sentido de pertenencia y genuino sello territorial, se puede observar en las ciudades de Santo Domingo, San Pedro de Macorís, Puerto Plata, La Habana, Santiago de Cuba, San Juan, Ponce, Kinston, Santa Lucía, Santa Marta, Barranquilla, Cartagena de Indias, Puerto Príncipe, Puerto España, Curazao, Saint John, Managua, León, San José, Antigua, Ciudad Panamá y en otras ciudades más.
En 2014, en el evento convocado por el Centro León, Federico Carlos Álvarez reveló aspectos importantes del impacto que tuvo esta obra en el desarrollo de la ciudad de Santiago. Él asume un hipótesis innovadora que se posiciona con la pregunta ¿qué hubiera pasado en esta ciudad sí el Monumento no se hubiera construido?. Reflexionó inteligentemente que el Monumento divide en dos la historia urbana de la ciudad de Santiago. Son dos grandes fases en esta metrópolis caribeña: antes y después de la construcción del Monumento.
Antes del Monumentola ciudad de Santiago estaba contenida en un anillo urbano que nunca excedió los 5 km cuadrados. Encerrada al Norte por el río Gurabo, al Sur por el río Nibaje, al Oeste por el río Yaque y al Este por una elevación de montes formada por el cerro del Castillo, el bosque seco de la Zurza y parte de los cerros de Gurabo. En síntesis, un gran río, dos de sus afluentes y varias elevaciones territoriales accidentadas, constituían los límites del crecimiento de Santiago. El Monumento quebró esa tendencia, generando un nuevo progreso que pasó a ubicarse en las planicies que continuaban después del límite Este de la ciudad de Santiago.
El censo de 1920 indica que residían en la ciudad de Santiago 20,495 pobladores, llegando a 67,771 habitantes en 1950. Desde los siglos XVI hasta 1944 (año de inicio de los trabajos de construcción), la ciudad ocupó ese espacio central ubicado en lugares planos del llano del entorno hidrográfico oriental del Yaque. De 1944 a 1968, ya la ciudad ocupaba una superficie aproximada de 12 Km cuadrados con una población de 173,133 habitantes creciendo en dirección de Villa González por el río Gurabo y hacia Tamboril y Licey al Medio en la línea del arroyo Nibaje, perteneciente a la subcuenca urbana de los ríos Guazumal-Pontezuela.
Rafael Emilio Yunén por su parte, hizo en ese momento una distinción importante entre lo que significa diseñar una obra y lo que supone construirla. Subrayó la construcción al considerar una serie de aspectos tales como: i) la necesidad de innovar en un medio carente de materiales y tecnología a causa de la Guerra Mundial; ii) el hecho que el 95% de los trabajadores eran de Santiago; iii) el esfuerzo no solo por construir la obra sino por ofertar un nuevo espacio público; iv) la forma proactiva como la ciudadanía santiaguera respondió al financiamiento del Monumento por medio de colectas populares; entre otros puntos clave. Su anécdota de la “persistente recua de burros subiendo por la calle del Sol cargando los materiales mineros necesarios para la obra” puso en evidencia el sentido primario pero muy laborioso, de la construcción de la obra.
Vale destacar que de todas las intervenciones al Monumento la más importante fue la concluida en 2007 por el presidente Leonel Fernández y el ministro de cultura, José Rafael Lantigua. Inició con una consulta ciudadana promovida por el Consejo para el Desarrollo Estratégico de Santiago (CDES) y el Ministerio de Cultura en el contexto del primer Plan Estratégico Santiago 2002-2010. Agradecemos al entonces gobernador de Santiago,José Augusto Izquierdo la confianza depositada en nosotros. Gestamos que los residentes y dueños de negocios del entorno, aportaran sus sueños y proyecciones de lo que esperaban fuera el nuevo Monumento.
Así es. Este proyecto fue concebido para crear las bases del nuevo Monumento.Elevó el acceso de la ciudadanía y lo convirtió en un espacio para caminar y correr por diversos senderos. La jardinería y espacios del entorno fueron transformados por el maestro Mamoro Matsunaga. Se hizo en 5 fases conforme a plan operativo. La estructura física renovada incluyó construcción, remodelación y recuperación del área física interna y externa, incluyendo paredes, senderos, aceras, contenes, impermeabilización, ebanistería en caoba, cornisas, columnas, tres nuevas escaleras externas, sustitución de mármoles y nuevas áreas revestidas en mármol, sistema eléctrico, nuevas cisternas, lámparas de interior y luminarias exteriores patrimonialmente seleccionadas.
Hoy al observar el Monumento desde distintos puntos geográficos, se entiende su estímulo transformador ala ciudad, especialmente hacia el Este y el Sur. La metrópolis surgida luego de la construcción de este emblema, permite visualizar una atractiva ciudad que ya comienza a ser reconocida como municipio cultural, turístico, ordenado y conectado.Con firmes tendencias a ser ambientalmente sustentable, rescatar el río Yaque y promotora de una elevada calidad.