Los proyectos del Plan Estratégico de “Santiago 2020”

Los 50 proyectos estructurantes del Plan Estratégico “Santiago 2020”, son las propuestas de Santiago y de las 245 instituciones, organizaciones sociales y munícipes independientes que lo formularon. Cada uno de ellas laboró en su concepción y descripción general. Son iniciativas que no ha surgido sólo de las mentes, computadoras y gestiones de la modesta oficina técnica que promueve el PES, sino del conjunto de socios y aliados que conforman el Consejo para el Desarrollo Estratégico de la Ciudad y el Municipio de Santiago INC. (CDES). En estos 50 proyectos estructurantes nos vamos a concentrar, todas y todos, no obstante, en los próximos 10 años surgirán nuevas iniciativas que de seguro serán muy sinérgicas con el PES 2020, y serán apoyadas con la misma pasión institucional que nos caracteriza.

Por definición el CDES no ejecuta proyectos, sino que los que están a cargo de la implantación son las organizaciones participantes de este proceso. El Consejo promueve, facilita, contribuye, apoya y certifica que las iniciativas se correspondan con los Objetivos Estratégicos y los Principios Rectores que este municipio aprobó el pasado 19 de Octubre 2010, por el consenso de sus entidades representativas, y la promulgación de la Resolución No. 2945-10 del Concejo Municipal de Regidores. Mandato que oficializa y le da carácter legal a este gran pacto social y territorial con la Visión de lograr un “Santiago emprendedor y visionario, apoyado en su capacidad de articulación participativa y cohesión social; que impulsa la producción y los servicios en un territorio ordenado, ambientalmente sustentable, con equidad social y de género, una ciudadanía saludable, bien educada que valora y promueve su cultura, así como la mejora permanente de su calidad de vida”.

Los cinco (5) Objetivos Estratégicos aprobados fueron: i) Santiago articulado, participativo y democrático; Santiago. También, ii) Santiago cultural, incluyente y saludable ciudad. Además, iii) Santiago ordenado, conectado y con equidad socio-territorial. Asimismo, iv) Santiago sustentable, verde y amigo del río Yaque, y finalmente pero igual de importante, v) Santiago emprendedor, competitivo y de empleos dignos. Los proyectos estructurantes que desde el 2010 al 2020 se pondrán en operación con una metodología innovadora que actualmente se encuentra en fase de revisión final pre-validación, que se ha denominado Sistema Integral de Implantación de Proyectos Estructurantes (SIPROES).

Los proyectos del PES 2020 son los proyectos de Santiago, su dueño, es la ciudad y el municipio que los aprobó, sus ejecutores son los actores estratégicos que los plantearon y los consensuaron en base a un diagnóstico que se sintetiza en una Línea Basal de 92 indicadores, territorializados en una cartografía innovadora, de alta calidad en geo-referencia, y precisión en las líneas de nivel y puntos críticos.     

Los proyectos del PES 2020 solamente en inversión requieren en los próximos 10 años, unos RD $66 mil, 184 millones, 604 pesos. Santiago se merece que de los más de 900 mil millones de pesos que la va a pagar a la Dirección General de Impuestos Internos DGII), el Estado dominicano le devuelva lo que ha calculado para su desarrollo local. Necesitamos en inversión pública apenas el 8% de lo que le vamos a pagarle al Estado, eso es muy justo y solidario.

De ahí que para asegurar su puesta operación, el Consejo Estratégico de Santiago (CDES), y todas sus entidades miembros y socios, tienen que buscar aliados locales, nacionales e internacionales. Poder Ejecutivo, Ministerios, Congreso, bancos nacionales, entidades financieras, agencias de cooperación, fondos FAST europeos, bancos de proyectos especiales con sede en USA y todo tipo de entidad que pueda colaborar, otorgar donaciones o prestar fondos a intereses razonables para el desarrollo local.

En esta noble tarea no podemos quedarnos reducidos a pequeñeces, no debemos consumirnos en nuestra propia salsa en rivalidades intestinas, tenemos que tener sentido de la historia, ser coherentes como hemos tratado de ser con los éticos y pro-activos principios de asegurar en cada proyecto estructurante, la calidad de vida de los beneficiarios, el empoderamiento de la ciudadanía, la sustentabilidad territorial, la gestión estratégica y la corresponsabilidad de la intervenciones que exitosamente vendrán. En eso estamos.