¡A masificar la prevención con Microzonificación!

Por Reynaldo Peguero

Obtenidos ya los resultados de la Microzonificación ha llegado el momento de la acción. Metodológicamente no hay por donde excusarse, escaparse o evadir la tarea. Se ha concluido en un modelo de zonación en 13 fuentes sísmicas desde el mismo centro de la ciudad de Santiago de los Caballeros hasta 200 kilómetros de distancia, en la cual las fallas de Enriquillo y Septentrional se tuvieron en cuenta particularmente. El cálculo de la amenaza sísmica probabilística se realizó en una cuadrícula de puntos que cubren una superficie de 112 kilómetros cuadrados cubriendo la ciudad. Para el cálculo se ha considerado una retrospectiva de dos períodos de retorno: 475 años y 2475 años. La propagación de incertidumbres se realizó a partir de un método combinado de árbol lógico para las elecciones Epistémicas y Monte Carlo para las incertidumbres aleatorias.

Creo que tenemos casi todo, aunque faltan ciertas especificidades claves para la zona 8 de la ciudad: Centro Histórico y su entorno noreste, y además debe añadirse que en consultas con expertos efectuadas para el proceso de implantación del Plan Estratégico “Santiago 2020”, se registra que todavía está pendiente la evaluación estructural de la edificaciones públicas o privadas de uso colectivo de la ciudad y de su calidad en relación al tipo de suelo y la resistencia de sus estructuras a los diferentes tipos de movimientos sísmicos. Pero con lo que hasta ahora tenemos, ha llegado la hora de la acción.

Primero a lo primero: la Prevención Primaria. Desde la Carta de Ottawa, 1986, la prevención de procesos que producen daño a la salud, sean estos de causas antrópicas o generados por otros factores biológicos, físicos, químicos, bioquímicos o inmunológicos, se divide en tres: i) la prevención primaria, ii) la prevención secundaria y iii) la prevención terciaria. Debemos ya apostar por un Masivo Programa de Prevención Primaria contra los efectos catastróficos de los Sismos en la ciudad de Santiago que considere también los municipios del entorno potencialmente afectables. Prevención primaria considera dos categorías clave: 1) la promoción-educación ciudadana y 2) las medidas de protección específica.

El primer plan estratégico 2002-2010, aportó como proceso, la Corporación Ciudadana Santiago Solidario (CCSS).  No lo hizo la Junta de Directores-Comité Técnico Directivo del Consejo Estratégico (CDES), ni la Oficina Técnica Coordinadora, que siempre han ejercido roles de fomentar, promover y facilitar, pero no de ejecutar proyectos. La Corporación Ciudadana Santiago Solidario (CCSS) repito, reitero, redundo, machaco e insisto para los que leen entre líneas que se entienda muy bien, fue creada por el mismo proceso estratégico de Santiago. Está reconocida por la ley 122-05, registrada institucionalmente, con una Asamblea original de 30 instituciones miembros, directiva electa y estatutos aprobados, es el espacio ideal para fomentar y realizar esta acción.

La CCSS es el perfecto órgano social para lanzar este programa masivo de prevención primaria para la promoción y protección específica contra los sismos en Santiago, con la participación y alianza activa de sus miembros de gobierno, Ayuntamiento Municipal, Gobernación Provincial, Oficina Senatorial Defensa Civil y el apoyo de todas sus entidades fundadoras como Medios Unidos del Cibao (MUCI), y sus organizaciones empresariales, universidades, sociales y comunitarias.

Para tales fines, la dirección ejecutiva de la Corporación Ciudadana Santiago Solidario (CCSS) con el aval de su presidente Monseñor Ramón Benito de la Rosa y Carpio, Arzobispo Metropolitano y la directiva en pleno,  habían aproximado una exitosa acción con la Agencia de los Estados Unidos para el Desarrollo Internacional (USAID) para promover ejercicios preventivos de Simulacros-Simulación para prevenir daños como efectos de eventos catastróficos. Simulación que se valora como un laboratorio práctico de entrenamiento, Sala de Mandos, Rescate Masivos y Movilización Social para ensayar la puesta en práctica un conjunto de acciones concretas. Ha llegado la hora de retomar esa gestión y con el aporte del Alcalde y su recién creado Instituto de Gestión de Riesgo (IGER), el Gobernador, el Senador y todas las entidades de la CCSS, salgamos ya a la calle a preparar y defender a Santiago.

Comparte en las redes